Es una novela de intriga con fondo histórico, es decir, que usando algunos datos reales añade partes de ficción para completar una historia de forma que sea verosímil.
La protagonista de la trama es Leonor (en el texto aparece como Eleanor) de Aquitania, personaje histórico que vivió entre los años 1122 y 1204, que llegó a ser reina consorte de Francia, de 1137 a 1152, y reina consorte de Inglaterra entre 1154 y 1189. Suplió como regente las ausencias de su hijo Ricardo y se retiró a la abadía de Fontevrault (que también aparece en la novela), donde murió y fue sepultada, junto a su esposo Enrique y su hijo Ricardo.
La novela abarca diez años de la vida de este personaje, de 1137 a 1147. Empieza con la noticia de la muerte de su padre en Santiago de Compostela, a donde ha viajado en peregrinación, y acaba cuando ella, junto a su esposo Luy, ha vuelto de la Segunda Cruzada a Tierra Santa.
La obra empieza cuando Eleanor recibe la noticia que su padre, el Duque de Aquitania, ha muerto en su visita a la catedral de Santiago de Compostela. Las noticias no son del todo claras pero enseguida piensa que el culpable es el rey de Francia, Luy VI El Gordo, de los Capetos y eternos rivales, siempre prestos a hacerse con Aquitania puesto que este territorio es más rico que el que regenta, a pesar de depender de él.
Eleanor pronto idea un plan para averiguar quien es el culpable del asesinato y vengarse de los Capetos: se casará con el futuro rey de Francia, Luy VII, y dará al trono una larga prole de aquitanos. Algo que su familia y seguidores no llegan a comprender.
El día de la boda llega la noticia de que el rey, que no ha asistido a la ceremonia que se celebra en Burdeos, ha muerto en parecidas circunstancias que el padre de Eleanor, con lo que a esta le surgen grandes dudas sobre la autoría de los dos asesinatos. ¿A quién interesa realmente estas pérdidas y la llegada al poder de los nuevos reyes?
Aunque Eleanor sigue manteniendo el poder de Aquitania, su vida en la corte de París no es nada fácil: su marido piensa que ella puede estar tras el asesinato de su padre, pues ya conocía su animadversión a su familia, por eso había reusado en un principio la boda; los miembros de la corte la miran con recelo, no es buena época para que la mujer ostente el poder; los guardaespaldas del rey, gente despiadada y cruel, la "convencen" para que deje de hacer investigaciones sobre los asesinatos,... Cada vez se va sintiendo más aislada y sola.
Una serie de acontecimientos, manejados por las autoridades eclesiásticas, hará que los esposos acudan como miembros de la Segunda Cruzada a Tierra Santa, que se salda con un rotundo fracaso. A la vuelta, a Eleanor le llegarán informaciones que darán lugar al desentrañamiento de las intrigas que la rodeaban, irá atando cabos y solucionará la maraña de enredos en los que se habían realizado todas las muertes ocurridas. También tiene la oportunidad de llevar a cabo su venganza.
En la obra aparecen varias voces que narran los hechos en primera persona: Eleanor, Luy VII y Rai. La voz predominante es la de la protagonista, la de los otros son muy breves. Hay una cuarta voz que tiene como protagonista al Niño, que la sostiene un narrador en tercera persona.
El personaje del Niño aparece poco en la obra para el peso que va a ir teniendo en su recorrido hasta llegar al final.
Otros personajes que aparecen y son importantes: Adamar, su ama de cría y protectora, que nos sorprenderá por su insospechado poder; Thierry de Galeran, templario, eunuco, guardaespaldas del rey, déspota, peligroso, despiadado; Suger, abad de San Denis, mentor del rey, inteligente, culto, amante de las riquezas; Aelith, hermana pequeña de Eleanor y su apoyo.
La novela utiliza un personaje femenino real que ostentó gran poder y ambición en la época en la que todo estaba dirigido por los hombres y la mujer estaba destinada a ocupar un segundo plano, lastima que sólo recoja una pequeña parte de su vida, pues en realidad vivió 82 años y estuvo detrás de la formación de las regencias de casi toda Europa.
En la obra aparece la corrupción del poder político y también de la Iglesia, los manejos de cualquier tipo para obtener poder y riqueza, la manipulación de las vidas, los abusos, las torturas, la facilidad para hacer desaparecer a los no deseados o a los molesto, el poco valor de la vida,...
La obra se centra más en las esferas de poder que en el pueblo llano, aunque vemos algunas costumbres, comidas y modas de la época. Llama la atención la norma que cuando alguien ultraja a una mujer es obligado a desposarse con ella como reparación del hecho,... ¿Os lo podéis imaginar hoy día?
Los envenenamientos me ha traído a la memoria la novela de "El nombre de la rosa".
La novela maneja bastante bien los hechos históricos, aunque en la parte de ficción se queda en una novela de intriga algo aburrida al principio y más interesante en su parte final. Se puede pensar que el personaje principal podía dar mucho más de sí. ¿Quizás se preparen futuras entregas? Sólo hay que fijarse en la bibliografía utilizada.
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