jueves, 16 de octubre de 2025
El infinito en un junco. Irene Vallejo
Club de Lectura. Octubre 2025
La obra nos
muestra una variedad de relatos con distintos grados de maldad.
Los tres
primeros relatos están relacionados entre sí. Nos muestran la historia de la
relación de tres personajes protagonistas desde el punto de vista de cada uno
de ellos en distintos momentos de sus vidas, en las que hay partes compartidas
y otras partes con relaciones distintas.
El personaje femenino
que aparece en el primer relato, ya viuda, vive sola en un mundo mezcla de
realidad y fantasía dejándose ayudar por la presencia imaginaria y la voz de su
difunto marido. Rememora el periodo de su juventud cuando convivió con un poeta
que se iniciaba y compartiendo amistad con un grupo de artistas bohemios y
rebeldes, críticos pero de estómagos agradecidos; recibían con risas los
relatos de la protagonista por ser una escritora de literatura fantástica que
además publica en folletines, pero agradecen sus invitaciones. La pareja se
rompe por la infidelidad de él.
El personaje
masculino, el poeta ahora consagrado, casado y ya mayor, sigue con la
autoestima alta pero ha dejado la gestión de su vida en manos de su mujer. Recuerda
hechos del pasado y comprueba cómo esa escritora a la que minusvaloraba ha
adquirido una gran fama.
La tercera
protagonista es la persona con la que cometió la infidelidad y después abandonó.
Nunca olvidó lo ocurrido ni a la “escritora” a la que profesa un odio mortal.
Vive con su hermano, ya mayores los dos, cada uno con sus traumas. Seguidora
asidua de las necrológicas, el destino le pone en bandeja poder despedirse de
los retos del poeta en una ceremonia que reúne a todos los protagonistas y con
un final sorprendente.
En estos
relatos entrevemos cómo perciben los personajes su entorno y lo reescriben, al
tiempo que toman conciencia de que también son percibidos y reescritos por otros.
Podemos
concluir que la autora de los relatos hace una defensa de la literatura popular,
la que busca sólo, o primordialmente, el entretenimiento del lector, tan
denostada por parte de un sector de autores y críticos que piensan que la
literatura tiene que servir a un propósito estilístico más elevado.
Uno de los
temas presentes en la mayoría de los relatos es la vejez, los personajes ya
mayores viven una etapa de decadencia, pero buscan una reconciliación con el
pasado, en algunos casos también pretenden ajustar cuentas. Pero la autora
emplea un tono humorístico, incluso en la mayoría de los casos irónico, ya que
los personajes asumen las limitaciones que les ha impuesto el transcurrir de la
vida y miran al pasado para intentar comprender cómo han llegado hasta aquí, si
sus decisiones y las de su entorno fueron las correctas, algunas para
mostrarnos algunos secretos ocultos hasta ahora, otras para saldar alguna que
otra deuda.
El culmen lo
tenemos en el último relato con la presentación de un grupo de jóvenes que
mediante la fuerza persiguen la destrucción física de las personas
representantes de ese sector social de la vejez, y cómo el relato contrapone la
historia de amistad entre un hombre y una mujer,
cómplices en el tramo final de sus vidas, haciéndoles frente, en su lucha por la supervivencia, mediante la
astucia y la estrategia, fruto de la experiencia.
También la
literatura está muy presente en muchos de los relatos. En ellos nos encontramos
que hay personajes que se dedican a la escritura; vemos como se producen textos
con un poderoso uso de la imaginación, ya que tienen un gran componente de
ficción, de surrealismo o un fondo onírico; aparecen ambientes literarios y la
búsqueda del éxito; habla de la competición, el éxito y los premios; vemos como
el mundo de los investigadores, estudiosos y críticos se acercan a los grandes
escritores e intentan indagar en sus obras,…
La autora no
deja de emplear cierta ironía en gran parte de esos relatos, incluso en los
métodos de creación. También rinde homenaje a los géneros considerados menores por
parte del mundo literario: la fantasía, la ciencia-ficción, el terror gótico,
el thriller,… Ella se maneja muy bien con ellos, nos hace reír incluso con
escenas dramáticas, nos hace reflexionar a través de la mezcla entre la
ligereza, lo cotidiano, lo común y el conocimiento profundo de los sentimientos
y de las pulsiones más profundas del ser humano, de las relaciones entre ellos
y de los comportamientos tanto individuales como colectivos.
Entre los
relatos aparecen muchos temas tan interesantes, además de la vejez, como, la inagotable materia de la enfermedad, la maldad, la
muerte, las humillaciones e injusticias contra las mujeres, la educación
culposa en la iglesia, el papel de la escuela, que, en vez de espacio de
socialización, es territorio para ultrajes emocionales y sexuales, y la culminación
en el convento; pero también nos muestra una tenaz defensa de valores, como el
derecho a la diferencia y la libertad individual, la salud
mental o la venganza, y una aguerrida vindicación de las mujeres en un entorno
hostil.