El Club de Lectura "Ben-al-Arte" se reunió el martes 9 de mayo para comentar la obra "Vinieron como golondrinas", de William Maxwell.
Aquí podéis leer parte de los comentarios aportados por los participantes en la reunión.
La novela nos
presenta a una familia acomodada de una pequeña ciudad del Medio Oeste
americano, cuando acaba de finalizar la I Guerra Mundial y está expandiéndose
la conocida como “gripe española” por todo el país, a través de la mirada de
tres de sus miembros: el hijo pequeño, Peter (Bunny), de ocho años; el hijo mayor,
Robert, 13 años; y el padre, James. Todos conforman la familia Morison junto a
la madre, Elizabeth, auténtica protagonista de la obra, y un nuevo hijo que
nacerá un poco antes de que finalice la novela.
La trama se
inicia el segundo domingo de noviembre del año 1918, justo el día antes de que
finalice la I Guerra Mundial.
A través de
Bunny vamos a empezar a conocer a esta familia. Dentro de su universo
minimalista, rodeado de los ruidos de la casa: la lluvia que golpea los
cristales, los sonidos de los dos relojes desacompasados, los ecos de los
movimientos generados por su hermano en el piso superior,…; hace que su madre,
generadora de ternura y seguridad, sea el centro de su vida, y para ello sólo
necesita pequeños gestos, simples miradas, movimientos casi imperceptibles de
las manos. Él es su pequeño ángel para ella.
Bunny intuye
que su estatus pronto cambiará porque prevé la ampliación de la familia.
Su padre
tiene un carácter más estricto, autoritario, pero su autoridad, por ser el
cabeza de familia, más que moral está movida por los convencionalismos
sociales, siendo su esposa la verdadera responsable de la vida familiar.
Todo está
medido y organizado: la hora de la comida, la siesta o del té con pastas; el
protocolo para el reparto de los platos; los temas de conversación de la madre
y su tía; a qué se dedicará cada uno de los hermanos en el futuro: abogado y
arquitecto,… Un puro retrato costumbrista, con la celebración del Día de Acción
de Gracias incluido.
Bunny es
pequeño, tiene su propio mundo de juegos, y se siente acosado por su hermano, pero
es curioso, está atento a los diálogos de los mayores, aunque no entienda todo
lo que oye.
Sabremos también
la visión que tiene Robert de la familia. Tiene trece años y se mueve entre la
infancia y la adolescencia. Siendo pequeño tuvo un accidente que le dejó una
secuela física, pero él lucha por no sentirse marcado y demostrar su autonomía
y su independencia. Para ello asume bastantes tareas domésticas asignadas por
sus padres, porque, aunque es desordenado en su organización personal, es
obediente. Además le encanta la lectura.
Robert es
poco dado a las efusiones cariñosas, huye de los “achuchones” de su tía, pero
en el fondo guarda un cariño que le hará sentir celos en algunas
circunstancias.
Tiene un sueño
recurrente que le hace imaginar que su cuerpo se recupera físicamente y puede
al fin superar esa situación que lo lastra, aunque no lo manifieste
públicamente.
Su madre
siempre lo ha tratado con normalidad; sin embargo, su padre, que nunca le ha
comentado nada, se afana ahora en una serie de comentarios estereotipados que,
en lugar de satisfacerle, le extrañan y lo incomodan.
Iremos conociendo
a otros miembros de la familia, la tía Clara, que vive con su marido y la
abuela. Se quedarán unos días con ellos mientras sus padres se trasladan a otra
ciudad para el momento del parto. La casa muy ordenada y con muchos objetos
huele a ropa guardada, las persianas están bajadas y hay poca luz, el cuarto de
la abuela huele a alcanfor, todo son prohibiciones o limitaciones, incluso no
los dejan jugar con unos juguetes guardados no saben para qué. A los hermanos no
les gusta el sitio. Robert descubre un diccionario y, como entretenimiento, se
dedica a buscar palabras.
Su tío tiene
costumbres muy religiosas, como bendecir la mesa antes de comer, y habla de
forma crítica de las restricciones impuestas por las autoridades en las
iglesias debido a la pandemia.
Robert cree
que su tía no le cuenta la verdad sobre el estado de sus padres. Cuando aparece
su tía Irene todo se aclara. La desgracia se ha cebado con su madre.
En el último
apartado de la novela conoceremos la visión que tiene el padre sobre la
familia, sus pensamientos y sus reflexiones sobre los diversos acontecimientos
que se van sucediendo.
El otro tema
importante en la novela es la aparición de la “gripe española” y su propagación
a lo largo de todo el país, que hace que se tengan que aplicar medidas
restrictivas. El autor deja claro que el origen de la enfermedad no es España.
Todos los
miembros de la familia Morison se contagian es distintos momentos, con
consecuencias dispares, generando en ellos un sentido de culpa por no haber
sido más previsores y cuidadosos viendo la gravedad de los contagios,
prometiéndose mejorar sus conductas en un futuro.
Ante las desgracias,
algunos quedan desamparados, desolados, se activan los protocolos sociales,
aunque alguno no sepa de donde arrancan esas costumbres tan arraigadas en la
población, otros se atreven a asumir la responsabilidad y encarar el futuro.
En los
momentos de reflexión de los personajes son muchas las posibilidades que se
barajan, desde el abandono, la salida fácil, hasta vislumbrar que todos podemos
aportar alguna solución, más si contamos con la ayuda de otras personas.
Cuando
aparecen la enfermedad, o la muerte, se activa el mundo de las supersticiones, comprobamos
que eso ocurre, no sólo en la novela, sino en todos los lugares del mundo
aunque se encuentren alejados.
La acción de
la novela se desarrolla en el ámbito doméstico, está cargada de emociones y sentimientos
pero sin caer en sensiblerías. La madre es la figura central y la que da
estabilidad emocional a la familia. También muestra los sentimientos masculinos
en los que se mezclan la culpabilidad, la inseguridad y el miedo a la
incertidumbre, ya que sus mundos giran siempre alrededor de la figura de la
madre-esposa.
Aunque la
obra se desarrolla en un periodo de tiempo en que no se hablaba apenas de
feminismo, podemos verla como un homenaje a la labor silenciosa y abnegada de
las madres, y esposas, dentro del ámbito familiar.
La próxima lectura es la novela de Eloy Moreno, Lo que encontré bajo el sofá, y la reunión está prevista para el martes 13 de junio a las 18:00 h.
